Ayer anduve de visita en el espacio que la asociación VA DE CUENTOS tiene en Alicante.
Nada más entrar uno ya percibe el aroma de los cuentos.
Estanterías repletas de cuentos cuidadosamente seleccionados a través de recomendaciones, viajes y búsquedas incesantes, en un intento respetuoso por ofrecer una literatura a pequeños y grandes absolutamente genuina. Como un gourmet que selecciona con exquisitez los platos de un menu inmenso y en constante renovación.
Los libros están clasificados por temáticas:
-emociones
-miedo
-ilustración y creatividad
-clásicos
,ect,ect,ect.
Uno podría pasar todas las tardes de un año entero y no abarcaría a terminar la bella propuesta de cuentos que han ido seleccionando con mimo, con cariño con pasión al oficio de cuentero.
La asociación tiene una variedad de propuestas que incitan a niños y grandes a reunirse frente a un cuento.
Trabajan en colegios, casas de cultura, hospitales, asociaciones de vecinos, y organizan cursos para que el cuento sirva como herramienta terapéutica, por ejemplo para superar un duelo. Tienen también cursos on-line para todos aquellos que no pueden acudir presencialmente y una compañía de teatro : «LA PARCELA», que estoy seguro promueve valores humanos necesarios en un mundo que agoniza.
La utopía pues se hace presente en el dia a dia de estos emprendedores de sueños, que navegando contra la invasión que nos producen la tiranía de las pantallas van haciendo una revolución silenciosa, armados de cuentos, proponiendo un espacio de silencio donde escuchar una historia, donde permitirte contar la tuya y donde ir creando un marco referencial que nos permita atisbar que un mundo de cuento es posible.
Si, va de cuentos, de cuentos va .
