Don Anselmo de las Eras y Don Guillermo de los Montes luchan por conseguir la olvidada princesa del tiempo perdido. En su camino vivirán todo tipo de aventuras absurdas e incomprendidas por ellos mismos.
Presencié a los juglares del Lute en uno de sus ejercicios de trasgresión, astracanada, ñaque provocador, libertad creativa y descaro vital que sólo producen aquellos